DE NUESTROS PRIMEROS AÑOS DE VIDA DEPENDE EL RESTO

“Cada día la velocidad de crecimiento es inferior a aquella del día precedente. Entre la edad de siete a ocho años, el cerebro de un niño crecerá lo mismo que lo hará entre los ocho y los ochenta años. En los pirmeros seis años, el niño aprende más de lo que aprenderá el resto de su vida.” Glenn Doman.

Desarrollo neuronalEn este gráfico puede apreciarse el desarrollo de las conexiones neuronales al nacer y a las edades de 6 y 14 años. Estas conexiones proliferan de forma vertiginosa en el cerebro del bebé en sus primeros meses de vida. Durante la primera década, el niño tendrá el doble de conexiones neuronales que un adulto.

El desarrollo de los niños no depende de su genética, sino que es un reflejo de la calidad de su ambiente.

Lo que sigue lo he tomado del libro “Children of dreams, children of hope” de Raymundo Veras, discípulo de Glenn Doman y fundador de los Institutos Veras.

Veras asegura que un niño de cinco años puede aprender más rápidamente que uno de seis, y por lo mismo, un niño de cuatro lo hace más rápidamente que uno de cinco y el de un año lo hace más que los demás debido al crecimiento temprano del cerebro.

Observando el crecimiento cerebral, el niño a los cinco años ha aprendido ya el 80% de todo lo que aprenderá jamás.

Resalta cómo los niños pequeños tienen la capacidad de ser “genios lingüísticos” que adquieren tres o más lenguas con la misma facilidad con la que aprenden su lengua materna.

Veras se lamenta de que la mayoría de los niños de un año reciben una estimulación muy pobre. Los adultos estimulan sus cerebros solamente cuando les conviene dentro de sus planes personales…

Bebé en su parquecito

“Lo tienen en una jaula – llamada “parque” – una prisión de privaciones estructuradas, y lo rodean de ejemplares absurdamente estúpidos. Repiten por él las cosas más estúpidas: que el niño tiene que trabajar para aprender; tiene literalmente que sacar por la fuerza la información de sus padres. Es algo muy triste y algo de locura monumental … No es culpa de los padres, no saben hacerlo mejor. No tienen ninguna intención de mantener ignorantes a sus niños. Les ha sido enseñado a dar los mejores juguetes a sus hijos y aburrirles con repeticiones estúpidas. ¡Es una gran tristeza, una tragedia!”

El desarrollo de los niños no depende de su genética, sino que es un reflejo de la calidad de su ambiente.

He dicho que mejorando el ambiente de un niño, su desarrollo probablemente se acelerará. Esto es lo que he dicho.
No he dicho, por el contrario, y lo repito, que los niños deberían ir al colegio antes.
No he dicho que el niño debiera ser presionado con el aprendizaje.
No he dicho que debierais comprar una mesa y una silla para la habitación de vuestro niño.
No he dicho que debierais transformar a los niños en robots áridos e insensibles.
No he dicho que debierais indoctrinar a los niños en regímenes de clase a edad precoz.”

“He dicho que los niños pequeños tienen una tremenda capacidad de aprender y que pueden aprender casi sin esfuerzo.
He dicho que los niños pueden aprender mucho más si alguien encuentra tiempo para mostrarles las cosas excitantes que les rodean.
He dicho que los niños exploran cualquier ambiente. Si el ambiente es excitante y rico en información, existen muchísimas posibilidades de que el niño se convierta en un individuo excitante y rico en información.
He dicho que si el ambiente es aburrido y falto de información, existen muchas posibilidades de que el niño crezca aburrido y privado de información.”

“MITOS Y ERRORES SOBRE LA ESTIMULACIÓN TEMPRANA”

4 respuestas a «DE NUESTROS PRIMEROS AÑOS DE VIDA DEPENDE EL RESTO»

  1. Realmente es fascinante Rosina, estoy muy de acuerdo con el texto, y creo que lo más rico será estimular el aprendizaje de un bebé en el mayor número de áreas posible. Probablemente sea la mejor forma de evitar que sea una persona unidimensional. Felicidades por tu blog!

  2. Después de haber leído algún libro de Doman,gracias a Rosina,me ha parecido fascinante encontrarme esta semana ante un recién nacido y no he cesado de tocarle la manita para que ejercitara la prensión; estoy como deseando poder estimularles ahora que se y convenciendo a los que no saben, que no creen, como si esto fuera cuestión de fe.

  3. Amiga Rosa, es tan difícil hacer que los que no creen lo comprendan… y como no podemos analizar el cerebro ni las habilidades de un niño tras la estimulación para saber hasta dónde ha llegado exactamente gracias a ésta, y nunca podremos saber cómo sería si no lo hubiésemos estimulado… A veces parece casi una cuestión de fe… yo tengo mucha fe y sé que no tiene efectos secundarios negativos, que la estimualación se basa en la manera en la que el cerebro se desarrolla de forma natural y que te une mucho al niño, así que todos los efectos serán positivos sin duda alguna… y eso no es tan difícil de comprender para cualquiera. ¿No crees?

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