Al considerar los problemas de aprendizaje debemos tener presentes tres áreas fundamentales: la visión, la audición y el desarrollo motor.
Éstos son los tres pilares sobre los que se basa la atención en el aula y las habilidades necesarias para poder leer, escribir, y realizar todas las tareas escolares.
Por esta razón, para una terapia completa, debemos revisar estas tres áreas en el niño y descartar problemas en las mismas o solucionarlos cuando están ahí.
– Para la visión necesitamos un buen optometrista comportamental (también llamado “optometrista del desarrollo”).
Todos los niños pasan por pruebas de agudeza visual por parte del pediatra o un oftalmólogo, quienes se ocupan de mirar que el ojo está sano y la agudeza visual es buena. Pero tras esta evaluación, es necesario ver cómo utiliza el niño los dos ojos de forma conjunta, si es capaz de realizar los movimientos oculares necesarios para leer y escribir y si su cerebro interpreta bien la información y consigue que las dos imágenes de los dos ojos se fundan en una sola y los ojos puedan converger cómodamente en un punto para poder leer y escribir… entre otras muchas cosas más… Todo esto lo evalúa y lo trata el optometrista comportamental.
– En el caso de la audición pasa algo parecido.
El otorrinolaringólogo o el pediatra miden si el niño “oye” o no… les preocupa que pueda haber una sordera. Pero no suelen considerar distorsiones a la hora de escuchar, si el niño percibe bien todas las frecuencias para poder hablar, leer y escribir con comodidad (el oído tiene mucho que hacer aquí también aunque nos sorprenda). Esto es esencial para poder prestar atención en el colegio, y unas distorsiones en la audición (sobre todo si hay hiperaudición en alguna de las frecuencias) pueden afectar seriamente no sólo la atención sino también el comportamiento dada su importante incidencia en nuestro estado de ánimo.
Para examinar y tratar estos problemas, es necesario acudir a un reeducador auditivo de los métodos Berard o Tomatis.
– En cuanto al desarrollo motriz… éste marca el nivel de desarrollo y madurez general del cerebro del niño. Y determinará directamente sus habilidades en todos los campos.
Por esto hay que evaluar si es correcto o si han quedado lagunas en el mismo que debamos trabajar. Hay varios métodos que llevan a cabo la necesaria “organización neurológica” a través de actividades de movimiento. Algunos de estos métodos son Doman, Padovan, Integración Sensorial y TMR (terapia de movimiento rítmico y reflejos primitivos).
Otras opciones interesantes para determinar el estado de desarrollo del niño pueden ser evaluar los reflejos primitivos que hayan podido quedar sin madurar (esto también lo hace la TMR) y el nivel de lateralización del niño. Pues si éste no está bien lateralizado (no es totalmente diestro o totalmente zurdo) cuando llega a primaria, puede tener serios problemas en la lectoescritura. Una deficiente lateralización, al igual que la presencia de reflejos primitivos, son signos de una desorganización e inmadurez cerebrales.
No debemos olvidar ninguna de las “tres patas de la banqueta” del aprendizaje (tal como nos ilustra María Jesús López), si nos dejamos alguna de estas patas, la banqueta se tambaleará siempre.
Interesante articulo y felicitaciones por promover esta valiosa informacion. Quisiera formular dos preguntas: ¿Especificamente que areas se pueden optimizar mediante la estimulacion temprana y que puede pasar con un alumno que solo oye por un oido?..
gracias de antemano y saludos…
Hola Ricardo,
la estimulación temprana tiene como objetivo el desarrollo de todas las áreas en el niño.
Pero es importante tener en cuenta que la estimulación temprana se realiza con niños sin problemas del desarrollo o también con niños de riesgo para reforzar su desarrollo y prevenir problemas. Como prevención, lo ideal es una buena estimulación temprana y procuarar un buen desarollo motor sobre todo.
Sin embargo, la estimulación temprana no sirve por sí sola para solucionar los problemas cuando ya están presentes y son importantes, para esto es necesario llevar a cabo una terapia con una estimulación mucho más intensiva. Lo que en el artículo menciono como “organización neurológica”.
Normalmente, cuando surgen las dificultades de aprendizaje, ya no es momento para la estimulación temprana, los problemas hay que trabajarlos de otro modo. En el artículo hablo de las soluciones desde mi punto de vista.
En cuanto al niño que oye por un solo oído, a esto debería contestarte un experto en el tema, como lo es Víctor Estalayo:
http://www.vegakids.com/
Saludos,
Rosina
Me he sorprendido gratamente por la calidad de informacion de tu blog. En la facultad en que estudio recien hemos empezado a tocar el tema de la E.T. y debo confesar que desconocia las tecnicas y metodos que se manejan en la actualidad….Si no es mucho pedir, hay un tema que no me quedo claro: la organizacion neurologica, por favor, podrias ampliar un poco acerca del mismo???, por ejemplo, en que consiste, desde y hasta que edad se puede alcanzar tal organizacion…
Hola Ricardo,
existe mucha confusión en torno al término “estimulación temprana” pues tiende a utilizarse para demasiadas cosas.
Escribí sobre esto intentando explicar mi punto de vista:
http://estimulacionydesarrollo.blogspot.com/2009/01/estimulacin-temprana-un-trmino-confuso.html
Yo soy maestra de educación infantil y me dedico exclusivamente a la estimulación temprana de niños hasta los 6 años. Trabajo con grupos de niños sin problemas del desarrollo, aunque en nuestros grupos puede haber niños de todas las condiciones. El caso es que no hacemos terapias enfocadas a solucionar problemas.
La estimulación temprana busca el pleno desarrollo en el niño y también prevenir futuros problemas en el desarrollo. Es algo que se realiza con todos los niños y muy en especial con niños de riesgo.
En cuanto aparecen problemas del desarrollo (o de aprendizaje, siempre derivados de los anteriores) necesitamos una estimulación mucho más intensiva y enfocada a la solución de estos problemas. Por lo tanto, se trata de una estimulación individualizada en un programa dieseñado para un niño por sus necesidades concretas.
Esto en España se llama “atención temprana” (aunque también se tiende a utilizar el término “estimulación temprana”, que pienso no debería utilizarse porque crea confusión en los padres en cuanto a los métodos y actividades que se realizan y los objetivos que se persiguen).
El problema es que en nuestro país, la atención temprana no siempre tiene el objetivo de lograr un pleno y adecuado desarrollo neurológico o cerebral en el niño. Sino que busca que éste sea funcional (que sea autónomo y pueda realizar el mayor número de acciones diarias por sí mismo además de lograr, hasta donde sea posible, los hitos más importantes como es sentarse solo, caminar, hablar, etc.). La atención temprana suele centrarse en los síntomas, y son éstos los que se trabajan con fisioterapia, logopedia, pedagogía y psicoterapia.
La organización neurológica utiliza los síntomas para conocer mejor el problema real y de fondo, pero no los trabaja directamente. Por medio de estimulación (principalmente motora y propioceptiva, pero también puede ser auditiva, táctil o visual) busca la maduración de las áreas cerebrales que deben llevar a cabo las funciones que buscamos en el niño. Esto supone una madurez y desarrollo de todo el cerebro. De esta forma mejoran o desaparecen todos los síntomas y se corrige el problema de raíz.
Existen, como menciono en esta entrada, varios métodos y enfoques para llevar esto a cabo. Puedes leer una entrada anterior en la que pongo la hipotonía de ejemplo para explicar los diferentes enfoques que yo conozco:
http://estimulacionydesarrollo.blogspot.com/search/label/hipoton%C3%ADa
Como te decía al principio, no realizo ninguna de estas terapias o métodos de organización neurológica. Tengo una formación básica en varios de ellos, pero principalmente hablo desde mi experiencia como madre que los ha aplicado. También por mis contactos con otras madres y padres, además de profesionales, con experiencia en los mismos.
Espero haberte aclarado algo todo este lío… sé que lo es, pero una vez que te metes y lo comprendes queda todo muy claro.
Saludos y gracias por lo que dices de mi blog. Bienvenido al mismo.
Casi se me olvidaba una de tus preguntas, la estimulación o atención “tempranas” lo son precisamente porque se llevan a cabo antes de los 6 años. Pero la organización neurológica se puede trabajar a cualquier edad y toda la vida. Por supuesto que los resultados y el tiempo necesario para lograrlos no son igual de buenos en los adultos que en los niños pequeños, pero ahora sabemos por las últimas investigaciones que el cerebro no deja de ser nunca plástico y existe la posibilidad de activar y reconectar nuestras neuronas toda la vida.
Saludos,
Rosina
Hola de nuevo,
después del comentario tan largo, aún se me ocurren un par de cosas que quería decirte…
Primero, que los enlaces veo que no salen enteros en esta página. Te aconsejo que leas los comentarios dentro de la propia entrada, pinchando en el título de la entrada en el blog. Ahí sí que salen enteros.
Y otra cosa, publiqué un artículo en el que intetaba explicar la diferencia entre “estimulación temprana” y “estimulación terapéutica”, ésta sería la organización neurológica:
http://estimulacionydesarrollo.blogspot.com/2008/08/estimulacin-temprana-y-estimulacin.html
Saludos,
Rosina
Gracias por la explicacion…